martes, 22 de diciembre de 2009

La suerte ha pasado tan cerca que casi nos ha rozado

Suelo decir, y me diréis, quizá con razón, que el que no se consuela es porque no quiere, que cuando la suerte pasa tan cerca y ni siquiera me roza es porque el destino me tiene deparado algo mucho mejor. Así que sigo esperando. Decía Sagra que ella no quiere dinero, solamente quiere ponerse buena. Estamos sanos ¿No? Y hoy es el día de la salud ¿No? Pues eso. Felicidades a todos mis vecinos agraciados en el barrio de San Isidro. A mí me espera algo mucho mejor.

1 comentario:

sagra dijo...

Seguro nene!!! Claro que si, no hace falta dinero para ser feliz, l
aunque ayude,claro.
Lo bueno está por llegar, como tú dices, mencantan los post tuyos super positivos.
Besotes wapisismo