martes, 5 de enero de 2010

2010

Muchos son los propósitos de cada año nuevo. Adelgazar, hacer deporte (concienciación hecha extensiva a la inscripción anual a un gimnasio al que no terminas yendo más de tres meses), viajar más, ver más a los antiguos amigos. Es cuando llega el final de cada año y haces balance cuando te das cuenta de la cantidad de cosas que has dejado pendientes. Me gusta sentir cerca a los míos y, sin embargo, sé que no hago lo suficiente para mantenerlos. Este año será especial porque seré padre. Mientras termino de asumir ese papel y me reafirmo en mi papel de marido en proceso de ser ejemplar, volveré a apuntarme ese deber de estar más con los amigos. Y es que los tesoros no deberían perderse. Feliz 2010.

1 comentario:

sagra dijo...

Marido ejemplar eres, y papá seguro que también. Los amigos son siempre importantes así que cuidalos.
Besotes