
Irresponsables los políticos que, con síntomas o sin ellos, promovieron la participación en mítines o manifestaciones masivas durante el pasado fin de semana. Aquellos que se burlaban del destino y aquellos que preferían soltar sus proclamas por encima de la emergencia. Aquellos que ahora no piden ni perdón y aquellos que ahora cierran la boca mientras ponen un comunicado en redes sociales y dejan que las gargantas ahuyen mientras ellos dejan pasar el tiempo y el temporal.
E irresponsable yo. Si, yo. Lo reconozco. Soy un irresponsable con cierta dosis de miserabilidad por haberme dejado llevar por el corazón antes que por la razón. Por haber cumplido los preceptos de mi sentimiento y haber picado mis billetes a Liverpool comprados hace tres meses y haber acudido a Anfield a cumplir el sueño de ver en directo el "You'll never walk alone" y a animar al equipo de mi alma en pos de una gesta. Sí, soy un irresponsable y lo reconozco. Pero hay virus que no tienen cura.
No hay comentarios:
Publicar un comentario