jueves, 4 de agosto de 2022

El Beni

El Beni es peculiar como él sólo. Bético, apasionado, hedonista y, por encima de todo, un tío de puta madre. Recurro a la coloquialidad en la descripción porque el Beni es coloquial como ninguno, lenguaraz, gracioso y, como buen gaditano, con un ingenio para el humor capaz de hacerte caer al suelo de una carcajada.

Cuando Juanra me lo presentó, allá por 2006, me puso sobreaviso antes de estrecharle la mano: "Seguramente, en tu vida, no has conocido a una persona como él". Porque Beni es amigo de todo el mundo pero sobre todo es amigo de sus amigos. En realidad no tiene tantos, a pesar de que un paseo con él por Cádiz es como una procesión de guiños y saludos, por ello, saberse en pleno derecho de su amistad, me honra por el cariño que le tengo y por la envidia que le proceso.

Porque Beni tiene todas aquellas cualidades que a mí me faltan; chispa, don de gentes y, sobre todo, una desvergüenza bien controlada que le convierte en el centro de todas las reuniones. Durante más de quince años y aun separados por la distancia, hemos sabido cultivar nuestra amistad a base de quedadas ocasionales, mucha cerveza y mensajes de teléfono. Tanto tiempo después puedo considerarle como uno de mis mejores amigos y puedo certificar aquello que decía Juanra era completamente cierto: No había conocido a nadie antes como él.

No hay comentarios: